El Gobierno de Castilla-La Mancha considera de manera «indudable» que el reparto del fondo de recuperación acordado por la Unión Europea ha de hacerse mediante una «reflexión compartida» entre el Gobierno central y las comunidades autónomas en el marco de una Conferencia de Presidentes. De ahí que censure «las peticiones siempre al alza de Cataluña, pensando únicamente en sus intereses».
Así lo ha manifestado la portavoz del Ejecutivo castellanomanchego, Blanca Fernández, preguntada durante la rueda de prensa que ha ofrecido este miércoles para dar cuenta de los acuerdos aprobados por el Consejo de Gobierno sobre el acuerdo sellado a nivel europeo.
Fernández, que ha indicado que la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas «ya está haciendo cuentas», se ha mostrado confiada en que dicho reparto de fondos se incluya entre los asuntos a abordar en la Conferencia de Presidentes ya convocada.
«Conviene mantener la colaboración institucional frente a una crisis que es extraordinaria, hubiera reparto de fondos europeos o no, pero más aún porque conviene hacer una reflexión compartida del Gobierno con las autonomías sobre el reparto de los mismos», ha proseguido.
«No voy a valorar las peticiones que está haciendo Cataluña, siempre son al laza y pensando únicamente en sus intereses. Conviene desde todos los territorios mirar por el interés general y pensar que allí donde más ha afectado la pandemia más dinero y más esfuerzos hay que hacer, planteamiento que hizo el presidente del Gobierno de España en Europa».
Tras precisar que en ese reparto de fondos europeos España e Italia salen ganando por haber sufrido un mayor impacto del COVID-19, la portavoz del Gobierno ha anunciado que Castilla-La Mancha fijará posición en esta dirección.
Dicho esto, se ha congratulado del acuerdo cerrado en el marco de la Unión Europea que, a su entender, demuestra que «la unidad nos hace más fuertes y que no se podía afrontar esta nueva crisis sanitaria y económica de la misma manera que la anterior, cuando se dejó a la población más vulnerable prácticamente en la cuneta y donde más se recortó fue en políticas sociales».
Por ello, Fernández ha destacado el papel del Gobierno de España, cuya contribución ha hecho posible el viraje hacia lo social de las instituciones europeas, tras convencer a la mayor parte de los socios de su manera distinta de hacer política y recabar el apoyo de Francia y Alemania.