El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural del Gobierno de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, ha anunciado que el Proyecto de Ley de Agua en el que está trabajando el Ejecutivo castellanomanchego contempla una inversión a lo largo de la próxima década de hasta 600 millones de euros en la mejora y construcción de depuradoras a lo largo de toda la Comunidad Autónoma.
Así lo ha puesto de manifiesto durante el acto de inauguración de la nueva depuradora de Cifuentes (Guadalajara), donde ha señalado que este proyecto legislativo estará en exposición pública dentro de un mes, y en su contenido se apostará por una «economía circular en materia de agua» con el compromiso de un abastecimiento de agua potable «de calidad» gracias al plan estratégico de depuración.
También la nueva norma, que espera esté aprobada antes de que acabe el año, traerá además del «esfuerzo enorme de inversión» actuaciones en mejora de abastecimiento.
Dentro de esta intención, este mismo miércoles «van a empezar a actuar las máquinas» en obras que garanticen el abastecimiento en Galápagos y en Torrejón del Rey. Con la nueva depuradora de Cifuentes se garantiza el abastecimiento de más de 3.000 personas al tiempo que se garantiza el cumplimiento de la normativa medioambiental.
Esta instalación formaba parte de un proyecto conjunto al que hay que sumar las depuradoras de Sacedón y de Horche, con una inversión total cercana a los 5,3 millones de euros entre los tres recursos.
En otro orden de cosas, Martínez Arroyo ha avanzado que en breve se volverán a retomar las conversaciones para mantener una vez pasado el verano, la segunda reunión de la Mesa del Agua de Castilla-La Mancha.
5.000 PUESTOS DE TRABAJO
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha intervenido en el acto para avanzar que todas las obras previstas en este plan de depuración llevarán aparejada la creación de más de 5.000 puestos de trabajo.
Ha reparado en la necesidad de que todos los municipios disfruten de agua «en condiciones de depuración y abastecimiento», razón en las que se circunscriben estas obras.
En materia hídrica, también ha tenido palabras para referirse a la situación del trasvase Tajo-Segura, ante lo que ha vaticinado que en esta legislatura «se va a acabar con el Memorándum del Tajo» que entre otras cosas permite trasvasar con más de 400 hectómetros cúbicos en cabecera.
«Lo vamos a hacer de una manera de otra, solo por las buenas, desde una posición en la que creo que vamos a tener buenos avances», ha aseverado, apuntando que en el pasado quizá haya habido «demasiados órdagos que a lo mejor no han resultado».
En el Levante, en todo caso, «no tendrán problema porque tendrán desalación», según ha augurado el presidente castellanomanchego.