El primer caso de coronavirus registrado en Castilla-La Mancha, un vecino de Marchamalo (Guadalajara) de unos 62 años que ingresó el 1 marzo en el Hospital Universitario de Guadalajara, falleció hace varias semanas, según ha confirmado el alcalde de la localidad gallarda, Rafael Esteban.
Esteban ha confirmado este «triste» suceso a preguntas de los periodistas, durante una comparecencia en la que ha lamentado el uso interesado que en su día se hizo de estos hechos tras convertirse Marchamalo en foco de atención de numerosos medios nacionales a raíz de conocerse varios casos seguidos en su momento, entre ellos también los de varios menores.
Esteban ha aludido en su comparecencia a las numerosas medidas adoptadas en su municipio desde un primer momento para hacer frente a la pandemia y ha aprovechado para anunciar que, este domingo, coincidiendo con la salida de los niños a la calle, los voluntarios de la localidad gallarda repartirán unas 800 mascarillas confeccionadas por mujeres del municipio, precisamente pensando en el público infantil.
«Hemos tratado de poner todos medios ante esta pandemia», ha subrayado Esteban.
