Con gran afluencia de asistentes se celebró el pasado viernes, día 18, en el Salón de Exposiciones de la Casa de Castilla La Mancha, la conferencia pronunciada por Ramón González Martínez, en torno a la revista ALBORES, que en este año hará setenta años de su desaparición. El acto ha sido promovido por la Asociación Cultural de Tomelloso en Madrid, cuyo presidente, José Vicente Cepeda Plaza, agradeció la presencia de Ramón por haber accedido gustosamente a la invitación.
Entre los asistentes, además de su hermana, hija e hijos de los hermanos González-Lomas, se encontraban antiguos compañeros del colegio Santo Tomas que residen en Madrid, Jose Ángel Treviño, presidente de AMAO (amigos de la ópera), Felix Redondo, director del coro juvenil de la Comunidad de Madrid. El presidente honorario de la Asociación para la Causa de Canonización de Ismael de Tomelloso, don Blas Camacho Zancada, Javier Navarro y Carlos Herrera, concejales del Ayuntamiento de Tomelloso y Carlos Susías Rodado, presidente de la Red Europea de lucha contra la pobreza y la exclusión social en España.
Fundada por el tomellosero D. Francisco Adrados Fernández (1925-2007) la primera junta directiva se forma con don D. Francisco García Pavón, P. Bernardo Martínez, D. Antonio López Torres, D. Carlos Morales Antequera y Dª Eva Cervantes. Como puede observarse, destaca entre sus componentes el nombre de una mujer, extraño pero real en aquellos tiempos. García Pavón es personaje capital en Albores: forma parte del Consejo de Redacción, sirve de enlace y contacto con otros escritores, escribe importantes artículos sobre La Mancha y sobre Tomelloso y publica cuentos y ensayos.
La publicación de la revista ALBORES se inició en septiembre de 1946 gracias al mecenazgo de Bodegas Santa Rita/Hermanos González Lomas, con la denominación de revista de exaltación manchega, coincidiendo con la alcaldía de Abelardo Contento y José María Ugena. Nace “como un proyecto de una manifestación generosa e idealista de hacer crecer lo más importante de la persona, su forma de ser y entender la vida, como movimiento de revalorización espiritual”. A partir del tercer número une vinculación con los P.P. Carmelitas, que el propio nombre de la revista explicita: ALBORES DE ESPÍRITU. “Era un mecenazgo idealista y desinteresado, pues a pesar de ser financiada por Bodegas Santa Rita, una bodega de Tomelloso, se da página en blanco y protagonismo a todos los artistas de la provincia”.
En 1949 publica su último número, el 33. Su presidente y fundador, D. Francisco Adrados, escribirá en la última página: «El ejemplo de Bodegas Santa Rita iluminará una de las mejores páginas de nuestra historia regional, sirviendo de estímulo a los amantes de las glorias comarcales y de escarnio a quienes tan poco importa el prestigio de su patria chica».
Para concluir, Ramón González expresó el objetivo principal de su exposición: “Mi objetivo hoy trasciende a la importancia literaria de ALBORES aun resaltando todas las virtudes de sus escritores y escritos pero quiero, muy especialmente, homenajear a los socios de Bodegas Santa Rita, entre ellos a mis tíos abuelos; Lorenzo, Ramón y Vicente (Hermanos González Lomas) los cuales (junto a otras 13 personas, en total 16 socios de Baja Bodegas Santa Rita) por su sentido de la vida y su generosidad propiciaron la publicación de ALBORES y, por el propio destino de la historia, nadie puso en valor su colaboración con el desarrollo de Tomelloso y no sólo a través de la revista”.
Entrañable tarde, pues, con claro matiz tomellosero en pleno centro de Madrid, donde todos los asistentes han podido disfrutar de la disertación ofrecida por el tomellosero Ramón González Martínez, de reconocido prestigio tanto a nivel social, cultural y político en nuestro pueblo y comarca, referente para todos aquéllos que tienen la satisfacción de poder conocerle y compartir una amistad fácilmente alcanzable por su destacada cordialidad.