El candidato del PSOE a la Presidencia de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha pedido este martes al candidato socialista a la Alcaldía de Guadalajara, Alberto Rojo, que tras la feria de septiembre le prepare un documento de desarrollo y modernización en forma de pacto social por la ciudad que vaya más allá de cuatro años.
Durante un acto público en el centro municipal integrado ‘Eduardo Guitián’ de Guadalajara, junto a la ministra de Trabajo en funciones, Magdalena Valerio, García-Page ha afirmado que esta ciudad «necesita un cambio sin miedos», pues es una «ciudad magnífica, con posibilidades, pero también en la que algunos, todos los días, como estrategia, lo único que hacen es introducir un miligramo más de anestesia».
De ahí que vaya a intentar por todos los medios que «Guadalajara sea la ciudad que fue con los alcaldes socialistas». «Necesitamos que la ciudad se mueva, que se propongan cosas, no quejas, victimismos y ataques». Además, en una nueva referencia –tras la sanitaria anterior– al alcalde, Antonio Román –a quien no ha citado–, ha precisado que si él no es presidente se va a quedar en la oposición.
García-Page, que antes de iniciarse el acto se ha encontrado con trabajadores del transporte sanitario –tras desconvocar las jornadas de huelga previstas– que le han dado «las gracias», le ha confirmado a Rojo, como futuro alcalde, que en la próxima legislatura inaugurarán juntos tanto el campus universitario de la ciudad como el «magnífico» hospital de Guadalajara.
De otra parte, ha admitido ante su auditorio que, si ha habido una cosa que le ha hecho llorar, mucho, en esta legislatura, ha sido la muerte de la exconsejera de Fomento, Elena de la Cruz, a quien ha definido como «humanidad pura, entregada y trabajadora», momento en el que se ha proyectado una imagen de De la Cruz al fondo del escenario, que ha levantado los aplausos del público.
El candidato socialista ha avisado en otro punto de su intervención de que el PP no gestiona mejor la economía sino «la economía de cuatro» y «el bolsillo de unos pocos» pero no el de la inmensa mayoría; y ha subrayado a la gente «olvida en España» instando a que «nadie pierda la memoria de los últimos cinco, seis años, no sea que pase como al candidato del PP, que no sabe quién es Cospedal».
VOTO REVOLUCIONARIO, QUE «CAMBIA Y MODERNIZA»
En este punto, y aunque las encuestas dicen «que el domingo ganamos, y ganamos mucho», ha recordado que lo que hace cambiar las cosas «es el voto de la gente», y para cambiar el rumbo de las ciudades hay que hacer algo «tan sencillo como ir a la urna y, sin ruido, meter un sobre, revolucionario, que cambia y moderniza».
De su lado, Valerio ha manifestado que «ya va siendo hora de que Guadalajara no pierda mas trenes», repasando cómo Marchamalo, Cabanillas, Azuqueca, Alovera, Torija, Yunquera y todo el entorno de la capital tiene unos polígonos industriales donde se están instalando empresas, que está bien, pero Guadalajara capital se está quedando a la cola»; y ha animado a votar al PSOE porque eso es «justicia social e igualdad» y para conseguir los mejores resultados tanto en las municipales como en las autonómicas y regionales.
El candidato a la Alcaldía, Alberto Rojo, ha pedido a los presentes que piensen su voto para que luego no se lamenten. «Esto es un viaje que tiene un tren, el tren del cambio», ha comentado; mientras que el secretario general del PSOE guadalajareño y cabeza de lista a las Cortes por la provincia, Pablo Bellido, ha destacado que Guadalajara «necesita un impulso, necesita alegría» y que la ciudad y la provincia «se den un abrazo».