El presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha reafirmado su «voluntad decidida» de que las políticas económicas que lleve a cabo si alcanza el Gobierno regional salgan de colectivos empresariales, ya que no concibe «otra manera de hacer política que de la mano de quienes mejor conocen los problemas».
Así se ha pronunciado Núñez en un desayuno informativo en Cabanillas del Campo (Guadalajara), en el que ha estado acompañado por el economista Daniel Lacalle, afirmando que es «fundamental contar con la sociedad civil y con quien está en contacto directo con los problemas». «Quién mejor para dar las soluciones al empresariado de Castilla-La Mancha que los propios empresarios», ha añadido.
El candidato se ha pronunciado a favor de «dinamizar la economía» a través de una «bajada generalizada de impuestos» en la Comunidad Autónoma frente a la política «de subida de impuestos» del Gobierno de Pedro Sánchez, haciendo hincapié en que una bajada de impuestos, unida a la puesta en funcionamiento del convenio sanitario, provocará un aumento de la población que «vive y trabaja» en la región pero está empadronada en la Comunidad de Madrid por estas dos razones.
Además, ha nombrado algunas de sus propuestas estrella en materia económica, como destinar el 50 por ciento del dinero de planes de empleo a fomentar la contratación privada. «Yo no creo en el mercadeo de los planes de empleo que el Gobierno de izquierdas ha querido liderar, yo creo que donde mejor está el dinero es en manos del sector privado para poder generar empleo», ha manifestado, respetando, eso sí, «la parte social» de dichos planes de empleo.
Del mismo modo, ha insistido en su iniciativa de destinar «en el primer presupuesto» que realice si es presidente de incluir una partida de 20 millones para estabilizar los contratos, de manera que quiere «financiar hasta 15 meses» los costes laborales de los trabajadores durante los cuatro primeros años de estas contrataciones, haciéndolo compatible con las restantes ayudas.
Asimismo, ha apuntado otras proposiciones como las ayudas de 3.000 euros para jóvenes que quieran dedicarse al autoempleo, sumadas a las bonificaciones en la cuota de autónomos, un programa de modernización y digitalización de pequeñas empresas y el fortalecimiento del sector logístico, políticas todas ellas incluidas en una ley del sector industrial.
Igualmente, ha incidido también en su idea de interconectar las distintas administraciones para facilitar que los trámites empresariales se puedan realizar desde una «ventanilla única» que ponga «al administrado en el centro de la administración».