El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha mostrado convencido de los «planteamientos constitucionales» de la nueva presidenta de Navarra, la socialista María Chivite, y ha instado a Navarra Suma a ayudar a la gobernabilidad de la región para «evitar con sus actos» que Bildu tenga poder de decisión «en el día a día» de la Comunidad Foral.
García-Page, a preguntas de los medios tras la reunión que ha mantenido este martes en Toledo con la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha valorado que Bildu no esté presente en el Gobierno navarro, recordando que «es la carta que a nadie le gusta pero está en la baraja».
El presidente castellano-manchego ha insistido en el carácter constitucionalista de Chivite, recordando que es «una persona que ha tenido persecución, que ha necesitado vigilancia y que sabe muy bien lo que es pagar, en términos personales y familiares, la violencia».
«No creo que haya un gobierno en España que vaya a tener más lupa que la que va a tener Chivite y estaremos todos vigilantes para que no se produzca ningún tipo de coacción por parte de los que representan a la extinta violencia terrorista», ha concluido.