La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Castilla-La Mancha se ha reunido en la sede de la DO Mancha en Alcázar de San Juan, en una sectorial del Vino donde se han debatido los principales problemas que afectan al sector vitivinícola de la región y las posibles propuestas que desde el sector se plantean. En esta reunión donde han participado viticultores, cooperativistas y productores se ha debatido sobre el problema de ventas que tienen algunas bodegas y la ralentización del mercado, en muchos casos motivada por la campaña de este año.
El secretario general de UPA Castilla-La Mancha, Julián Morcillo, ha explicado que “creemos que es necesario plantear medidas de organización del sector; medidas que la UPA ha explicado en muchas ocasiones pero que no terminan de concretarse”. Desde la organización agraria se han planteado algunos problemas tras una campaña importante, con lo que UPA “es clara: Se necesitan herramientas a corto, medio y largo plazo que sirvan para evitar fluctuaciones en el sector tal como la planificación dentro de una interprofesional de Castilla-La Mancha que debe de ser complementaria a la estatal, sin interferir con la nacional”, centrada en cuestiones de control de la producción y que aborde el futuro que queremos en la región para el sector.
El responsable de la organización agraria se ha referido, asimismo, a la necesidad de disponer de una ley de vino en la región, un sistema normativo con un sistema sancionador, porque “necesitamos herramientas de planificación que sean efectivas”. En este sentido, desde UPA han planteado el establecimiento de limitación de rendimientos, así como medidas que actúen en el mercado como el almacenamiento obligatorio y así evitar las fluctuaciones de mercado. “La región debe plantearse de que es el momento de posicionarse en estas cuestiones que se han planteado en la sectorial del Vino, porque con herramientas adecuadas podemos y debemos influir en los mercados internacionales”, ha concluido Morcillo.
Por su parte, Alejandro García-Gasco Alcalde, responsable de Vino de UPA, ha explicado que se están planificando medidas concretas para paliar “la situación que vivimos ahora porque el mercado está atascado, poca venta, y si hay operaciones están a la baja”. Desde UPA van a trasladar esta preocupación, tanto esta como otras cuestiones que se han abordado en la sectorial se van a trasladar mañana al Ministerio y en breve a la Consejería de Agricultura, “con medidas en el corto, medio y largo plazo”, medidas concretas y útiles para el progreso y futuro del sector.
García-Gasco ha recordado que en estas campañas “deberíamos haber apostado por el vino embotellado y de calidad que es el que ofrece valor añadido y afianzar mercados así como hacer uso efectivo de las medidas que nos permite la Unión Europea. Es decir, hay que lanzar un mensaje de regulación”. Asimismo, ha puntualizado que, en el momento de poda que se encuentra el sector, diseñando la próxima vendimia, “también debemos lanzar el mensaje de que las altas producciones nos abocan a la situación que estamos viviendo y no valen producciones de 40/50.000 kilos por hectárea con calidad dudosa”. Es decir, las cooperativas necesitan herramientas para que estas elevadas producciones vayan a otro tipo de consumos, “para evitar la situación que tenemos en la actualidad”.
Finalmente, dentro de los aspectos que se han abordado en la sectorial de UPA Castilla-La Mancha, se ha tratado la necesaria colaboración con la AICA para el cumplimiento de contratos, el cumplimiento con la ley de la cadena alimentaria, entre otros parámetros importantes para la estabilización y futuro del viticultor profesional de la región.