La Audiencia Provincial de Ciudad Real juzgará a partir de este lunes, 30 de septiembre, a un exsacerdote acusado de abusar sexualmente de nueve niños en el Seminario de Ciudad Real entre los años 2013 y 2015 mientras les impartía enseñanza.
Unos hechos que según la Fiscalía son constitutivo de una veintena de delitos de abuso sexual por los que solicita una pena de 40 años de prisión.
Entre los escenarios más repetidos de sus supuestos abusos, según recoge el escrito de acusación, está la piscina del Polideportivo Puerta Santa María de la capital, donde acudía con sus alumnos. Un lugar donde «aprovechaba para acercarse a ellos, hacerles subrepticios y lascivos tocamientos». Varios de estos episodios tuvieron también lugar en las propias habitaciones de los alumnos, donde «solía entrar sin avisar».
Así, la Fiscalía ha solicitado 16 años de prisión por cuatro de los delitos, 24 por seis de ellos y finalmente la cantidad 83.160 euros, que es la suma de las multas impuestas por los once delitos restantes de los que se le acusa.
Además solicita la prohibición de desempeñar actividades que le faciliten la ocasión para cometer hechos delictivos de similar naturaleza; la obligación de participar durante cinco años en programa formativos, laborales, cultural u otro similares e inhabilitación especial para cualquier profesión u oficio que conlleve contacto regular o directo con menores durante seis años. También ha pedido la indemnización de 2.000 euros a cada uno de los menores por el daño moral.
El presunto caso de abusos sexuales se conoció en marzo de 2016 cuando el Obispado de Ciudad Real informó que había mandado un informe sobre el mismo al Vaticano y que había dado traslado a la Fiscalía. A continuación, la Fiscalía presentó la correspondiente denuncia que ha dado pie al proceso cuya vista oral comienza este lunes en la Audiencia Provincial de Ciudad Real y está previsto que se dilate durante varios días.