El Ejecutivo autonómico instituirá, a partir del próximo año, una distinción especial dedicada a los emigrantes castellano-manchegos que se entregará, cada 31 de mayo, coincidiendo con el acto institucional del Día de la Región, junto a las ya tradicionales medallas de oro, placas al mérito regional, menciones especiales y títulos honoríficos de hijos adoptivos y predilectos.
Así lo ha avanzado el presidente del Gobierno regional, Emiliano García-Page, durante la recepción a los representantes de las comunidades originarias de Castilla-La Mancha y de las casas regionales de otras autonomías asentadas en la comunidad autónoma, que se ha celebrado este martes en Toledo, ha informado la Junta en nota de prensa.
Tal y como ha explicado el presidente regional, el establecimiento de este premio nace con la intención de que «esta región no olvide» y «deje siempre un rincón en la memoria» a las «personas, entidades y organizaciones» que siguen a día de hoy «esforzándose en el exterior»; un reconocimiento que irá dirigido a «un colectivo, familia, empresario o persona que sea un buen ejemplo de lo que es Castilla-La Mancha fuera».
El presidente de Castilla-La Mancha ha tenido palabras de reconocimiento para los castellano-manchegos que residen fuera de la región, así como para quienes siguen liderando las comunidades originarias en otras autonomías y países.
En este sentido, ha valorado el «plus» de «esfuerzo silencioso» que, junto con las mujeres, ha tenido que hacer «la gente que se ha tenido que ir de su tierra» durante estos cuarenta años de democracia; algo, ha remarcado «que no se puede quedar en agua de borrajas».
«La Comunidad Autónoma tiene una deuda con los que tiráis del carro», ha subrayado el presidente García-Page, «porque no solo representáis a vuestra tierra fuera» sino que estos proyectos siguen adelante por «el impulso, a veces, de una persona que le quita tiempo a su familia o sus amigos».
En esta misma línea, el presidente ha adelantado que, en los próximos años, tratará de visitar todas y cada una de las comunidades originarias castellano-manchegas que se encuentran asentadas en otras regiones y países, comenzando por un próximo encuentro con la Federación de comunidades originarias de Barcelona en enero que sirva de apoyo «rotundo» a las personas que están sufriendo una «presión psicológica, social, ambiental que no tiene parangón y que es injusta en la democracia que vivimos».
40 AÑOS DE ENTE PREAUTONÓMICO
El presidente se ha referido asimismo a la efeméride del 11 de diciembre de 1978, momento en el que se produce la reunión para la declaración del ente preautonómico de Castilla-La Mancha, como ejemplo de los avances cosechados tanto por España como por la región durante estas cuatro décadas de democracia.
Al respecto, ha apuntado la presencia de banderas preconstitucionales en el propio acto celebrado en Almagro (Ciudad Real), como muestra del período de transición por el que atravesaba una región como Castilla-La Mancha y que ha devenido en «cuarenta años, básicamente, de éxito».
En este sentido, se ha referido a algunos de los logros cosechados durante la etapa democrática, como la consecución de derechos sociales, la universalización de la Sanidad y la Educación, la incorporación de España a la Unión Europea, el crecimiento del nivel de renta o el aumento de la esperanza de vida, entre otros. Logros, ha recalcado García-Page, «que hay que regarlos», porque «no vivimos algo irreversible» pero que, en su conjunto, han marcado «una explosión de libertad en todos los sentidos».