La directora del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha, Araceli Martínez, ha señalado que el próximo Estatuto de la Mujer Rural de la región será un «compendio de medidas» que ya están en otras leyes como la Ley para una Sociedad Libre de Violencia de Género, la Ley de Igualdad o el Plan Estratégico para la Igualdad, pero incorporando «novedades» para hacer «más explícito» el compromiso del Gobierno regional en la promoción de un desarrollo rural sostenible si se incorpora la perspectiva de género.
Así lo ha indicado Martínez en declaraciones a los medios este lunes antes de la reunión del Consejo Regional de las Mujeres, donde ha dicho que este es uno de los puntos «más importantes» que se van a tratar en este encuentro.
Martínez ha destacado que este Estatuto tiene cuatro títulos principales vinculados al sector agrario, pero al mismo tiempo que se ofrece un marco de participación de las mujeres del sector agrario también se potencia «el empoderamiento y la visibilización de la aportación de las mujeres rurales en su conjunto» en favor de la formación o la incorporación al mercado laboral.
Además, la directora del Instituto de la Mujer ha destacado que una de las medidas que aún estaban sin desarrollar cuando se aprobó la Ley para una Sociedad Libre de Violencia de Género era el punto de la creación de un órgano de vigilancia, por ello ha señalado como «meta» revisar y analizar los contenidos que se producen en los medios sociales, especialmente las redes sociales.
También ha dicho que esa vigilancia se producirá en la publicidad y los medios de comunicación con el ánimo de que se transmita una imagen positiva y empoderada de las mujeres de Castilla-La Mancha a toda la sociedad. Martínez ha asegurado que este punto estará listo para la primavera del próximo año.
Para Martínez, las redes sociales son un canal a través del que se «ejerce violencia sobre las mujeres, especialmente las jóvenes, a través de la violencia de control». Por ello, ha instado desarrollar herramientas e instrumentos para poder actuar en el ámbito de las redes sociales para «ofrecer una mejor atención a las víctimas de violencia de género».
