La directora general de Relaciones Institucionales y Asuntos Europeos, Virginia Marco, ha defendido, dentro del debate sobre el futuro marco financiero plurianual, el fortalecimiento de la Política de Cohesión como medio para asegurar una igualdad de condiciones que permita a todos los ciudadanos, especialmente a los procedentes de los territorios menos desarrollados, beneficiarse de las ventajas ofrecidas por el mercado común y la integración europea.
Marco, que ha asistido en Bruselas a la Comisión para la Política de Cohesión Territorial del Comité Europeo de las Regiones, ha destacado la necesidad de la Política de Cohesión al «ofrecer igualdad de oportunidades y mejor calidad de vida por lo que es un pilar indispensable del Mercado Único, al unir a países distintos y a regiones con desiguales de desarrollo».
Además, ha subrayado los beneficios de ésta porque apoya la innovación, las pymes, la economía baja en carbono, las infraestructuras para el transporte, la regeneración urbana, la diversificación rural, la educación, el empleo, las infraestructuras sociales, o la inclusión social entre otras medidas, ha informado la Junta en nota de prensa.
En este sentido, la directora general de Relaciones Institucionales y Asuntos Europeos ha señalado como ejemplo la Inversión Territorial Integrada que va a permitir destinar más de 500 millones de euros provenientes de fondos europeos a la lucha contra la despoblación que afecta a Castilla-La Mancha.
Marco ha recordado la reivindicación que el Gobierno regional ya ha realizado en numerosas ocasiones a las instituciones europeas para que el gasto asociado a estos fondos no computen como déficit, «ya que esta limitación impide en la práctica la utilización de los recursos que deberían servir para reducir las desigualdades entre regiones».
En reiteradas ocasiones, Castilla-La Mancha ha pedido que los fondos que recibe de la Unión Europea no se vean reducidos con la nueva Política de Cohesión que se está debatiendo para 2020.