El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha comprometido a crear dos mil nuevas plazas con financiación pública en residencias de mayores de la región antes de 2020, con las que la región llegaría a tener un total de 17.000 plazas residenciales de carácter público.
García-Page ha manifestado, durante la inauguración de la residencia de mayores ‘Los Quiñones’ de Vianos (Albacete), que, de esta manera, se sigue impulsando la estrategia de incremento de plazas residenciales que comenzó con la legislatura, un tiempo en el que «hemos sido capaces de poner en marcha dos mil plazas nuevas para personas mayores y sin tener que rascar el bolsillo de los contribuyentes».
Además, el presidente castellano-manchego ha anunciado «grandes inversiones» en materia residencial a lo largo de 2018 y se ha referido a la nueva residencia que tendrá Albacete capital, a la que sumará otra más en la Sierra del Segura. Asimismo, ha recordado la próxima apertura de las residencias de El Ballestero, Lezuza y Molinicos, también en la provincia albaceteña.
Por otro lado, ha lamentado que el anterior Ejecutivo regional paralizase hasta 122 instalaciones de este tipo «que se quedaron hechas y a punto de inaugurar» y que fueron objeto de «recortes de modo pasivo», como la de Vianos.
«Pero en este Gobierno nos hemos comprometido a ir abriendo todas ellas», ha garantizado García-Page, que también ha tenido palabras de cariño para todos los profesionales que trabajan en este tipo de recursos, quienes «tienen que dejar los problemas en casa para venir aquí a dar lo mejor de sí mismos todos los días».
PENSIONES
Por otro lado, y refiriéndose a la propuesta del Gobierno central de calcular las pensiones computando toda la vida laboral voluntariamente, García-Page ha considerado que las pensiones «no pueden ser un problema» y que el país «tiene una cita» con ellas.
Asimismo, ha insistido en la necesidad de formalizar un nuevo acuerdo nacional sobre pensiones con el objetivo de hacer viable el sistema, mostrándose «comprometido como presidente y dirigente político» con dicho objetivo.
El presidente ha apuntado que «la pensión dentro de unos años la tiene que cobrar gente que lleva años trabajando para que otros la puedan cobrar». «No nos podemos permitir la enorme injusticia de que entre en quiebra el sistema», ha advertido.