El sindicato CSIF ha asegurado, tras conocerse este jueves los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) relativos al año 2017, que las políticas ejecutadas por la Junta de Comunidades «no consiguen crear empleo estable» y ha afirmado que «se mantiene una nociva vinculación con los cambios estacionales de la actividad».
El sindicato ha manifestado que los datos de 2017 «podrían ser considerados positivo de no ser por las importantes fluctuaciones que sufre el mercado laboral en la región», recalcando que la región perdió 15.500 empleos en el último trimestre.
CSIF ha lamentado también que «todos los sectores aumentaron el número de desempleados» en el pasado año, destacando sectores como la industria, servicios, agricultura, construcción o el sector público. Además, ha hecho hincapié en que «se siguen destruyendo puestos de trabajo en el empleo joven: 6.600 parados más en la franja de edad de 16 a 24 años».
La central sindical ha manifestado que el Gobierno regional «no puede ampararse en los datos interanuales, ya que a pesar de que es cierto de que Castilla-La Mancha cerró 2017 con 22.500 parados menos respecto que el año anterior, también lo es que la estacionalidad no puede ser tan determinante en el mercado laboral de la región».
«Es más, el trabajo continúa precarizándose», ha apuntado el sindicato, explicando que «los contratos temporales aumentaron 2,3 puntos en el último trimestre frente al descenso de la contratación indefinida».