Agentes de Policía Nacional han localizado a un niño de unos 5 años de edad, autista, el cual se encontraba aturdido y desorientado en la parte posterior del cementerio de Ciudad Real, donde había buscado cobijo asustado por la presencia de unos perros de grandes dimensiones.
Tras recibirse llamada al teléfono de Emergencias Policial del 091 de que un niño de corta de edad transitaba solo y con una bicicleta por un lugar poco propicio como es el descampado que hay a la espalda del cementerio municipal de esta capital, se comisionó a una dotación policial para que, urgentemente, se personase en las inmediaciones e hiciera las primeras gestiones con el fin de preservar la integridad del menor.
Una vez en el lugar, no observaron nada y mucho menos a un niño, por lo que hicieron un rastreo, donde sí pudieron ver a perros de grandes dimensiones vagando por el lugar, ha informado la Delegación del Gobierno en un comunicado.
Tras varias batidas por la zona, pudieron observar que, entre la maleza, había un menor, el cual se distinguía el pelo rubio entre la vegetación, aparentemente asustado por la presencia de perros en el lugar, al que se acercaron y al intentar hablar con él, percibieron que no hablaba nada castellano y que además presentaba algún tipo de problema de comunicación.
Al no poder identificarlo, lo subieron al vehículo policial para dar una vuelta por el lugar, ya que no era normal que el niño, en ese lugar, estuviera solo y no lo estuviese buscando alguna persona mayor.
Momentos después se encontraron en las inmediaciones del parque del cementerio a un hombre en actitud vigilante al que se acercaron los agentes para preguntarle, comprobando que tampoco hablaba español, pero mediante gesticulación dio a entender que había perdido a su hijo, que no entiende el idioma, sufre de autismo y lo estaba buscando, momento este en que, los agentes, sacaron al niño del vehículo policial, dirigiéndose al padre para darle un abrazo, por lo que, en ese mismo instante, le hicieron entrega del menor.