Al parecer se encontraba realizando un graffitti a unos 200 metros de la estación de tren de la localidad con un amigo, cuando, al observar una luz trataron de esconderse creyendo que era un vigilante de seguridad.
Estas mismas fuentes han señalado que el fallecido, natural de La Roda, habría corrido en dirección a las vías del tren y se habría precipitado, por lo que el suceso se ha considerado como un accidente «fortuito».