La Posada de los Portales de Tomelloso acoge hasta el 16 de abril la exposición de José Antonio Quintano. Quintano, León 1948, ha dedicado su vida profesional a la música trabajando fundamentalmente como productor para cine y televisión, arreglista y director musical de artistas. Pero a pesar de su dedicación a la música, Quintano ha tenido siempre una intensa inquietud por la pintura.
El concejal de Cultura, Raúl Zatón señalaba que era un orgullo para la ciudad de Tomelloso, después de ocho años, tener la obra del maestro Quintano en la Posada de los Portales, un lugar emblemático para la cultura de la ciudad. Se trata de una muestra distinta, dijo el concejal, en la que se presenta la gran obra de este músico. Zatón puso en valor el gran currículum musical del maestro Quintano, reflejado en su obra plástica, que tiene una armonía distinta, dependiendo de los distintos espacios donde él quiere plasmarla. El concejal, para acabar, invitó a los vecinos y visitantes a visitar la exposición.
El autor señalaba que no sabía definir lo que hace, “me sale del corazón, ante todo soy músico”. Aseguraba que en los cuadros hay mucho de la profesión “verdadera” de Quintano que es “ser músico”. Por ello, intenta que haya mucho equilibrio en todo lo que hace: hay mucha simetría. Al artista la madera le viene desde la infancia, su padre era carpintero y él se crio entre virutas “el olor de la madera me tira”. En sus composiciones hay muchas tiras de cedro, explicaba, porque el olor de esa madera al cortarla “es el mejor aroma del mundo”.
A Quintano se le ocurren las ideas y empieza a desarrollarlas poco a poco, siempre buscando una temática, aclaraba. Por ejemplo, hay algunas obras inspiradas en Fuerteventura; otras en Lanzarote; las estructuras más urbanas están inspiradas en Puerto Madero, un barrio de Buenos Aires. “Siempre me busco alguna temática que me inspire para las cosas que hago”.
Utiliza una técnica “muy barata”, tableros de contrachapado, cortados tira a tira, nos contaba Quintano. Cuando quiere torcerlas muchos, decía, las corta en contra de la veta, al contrario si los quiere recto. Y, por supuesto, “mucho trabajo”, recalca. Para acabar, Quintano señalaba que supone un honor exponer en Tomelloso, una ciudad de artistas tan grandes.
El maestro Quintano comienza sus estudios de dibujo y técnicas de pintura en 1975 y en 1980 inicia su actividad pictórica que le conduce por diferentes etapas hasta llegar a lo que hoy supone el eje fundamental de su obra: el constructivismo geométrico. Quintano en esta retrospectiva ofrece una obra contundente que juega con las formas, la geometría y los relieves mostrando su plasticidad y fuerza que no dejarán indiferente a nadie.
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