Como ocurre todos los primeros sábados de agosto desde hace nueve años tocaba fiesta en Tomelloso. La peña Los Canuthi, una vez dejadas atrás las dudas iniciales, organizó, una vez más, el Guateque más grande del mundo. Más de 2.000 personas acudieron a la, sin ninguna duda, fiesta del verano de Tomelloso, no solo con ánimo de diversión, también para hacer llegar su solidaridad a quienes más lo necesitan. Recordemos que en esta edición Los Canuthi donan 1.000 euros de lo recaudado a Cáritas.
En los jardines del parque, Marcos Galván y Rafa Calatayud, recetaron, sin tregua y con gusto música de los 60 y 70. El, público se divirtió de lo lindo y el baile no faltó. Como nos tiene acostumbrados la peña anfitriona, en el Guateque no faltaron las actuaciones estelares, como la de Palito Ortega, por poner un ejemplo.
Durante el sábado 6 de agosto Tomelloso sufrió una epidemia de melenas, patillas, pantalones de campana, flores, cazadoras de cuero y faldas de vuelo. Antonio Huertas fue, de nuevo, la avenida del guateque, parecía una suerte de túnel del tiempo por la que yeyés, roqueros y hippies transitaban a los jardines de parque, camino de la gran fiesta. El largo día se iniciaba a las 9 de la mañana con la I Concentración de Clásicos de Tomelloso que sirvió para meternos en harina, o mejor dichos, para calentar motores.
Durante noche se sortearon 4 premios de 400 euros en metálico y un viaje de 5 días para dos personas a la isla de Mallorca.
El objetivo de que la ciudad de Tomelloso se divierta con el Guateque, que es el que buscan Los Canuthi con la organización de esta fiesta, estamos seguros de que se cumplió.
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