Los Grupos de Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha gestionarán un total de 130 millones de euros entre los años 2014-2020, procedentes del Programa de Desarrollo Rural a través de la estrategia Leader. Unos fondos que permitirán subvencionar proyectos de diferente índole que se lleven a cabo en los territorios rurales de nuestra región, incluidos los relacionados con la industria cultural y creativa.
Así lo ha explicado el presidente de la Red Castellano Manchega de Desarrollo Rural (RECAMDER), José Juan Fernández, en el I Foro Regional sobre Fuentes de Financiación para las Industrias Culturales de Castilla-La Mancha, que se ha celebrado en Alcázar de San Juan, organizado por la Asociación de Industrias Culturales de Castilla-La Mancha y la
Viceconsejería de Cultura de la Junta de Comunidades.
Fernández, que ha participado como ponente, ha recalcado que los principales retos contemplados en las estrategias que han elaborado los Grupos de Desarrollo Rural para el periodo 2014-2020 son la creación de empleo, la diversificación de la economía rural, la recuperación y conservación del patrimonio cultural histórico y arquitectónico, y la mejora de la calidad de vida en el medio rural para minimizar el déficit de oportunidades respecto del medio urbano.
En este sentido, ha apuntado que “el mundo rural tiene que contar con la industria cultural y creativa porque es una herramienta más para conseguir los retos planteados y para lograr un medio rural vivo y atractivo” y ha añadido que “la propia industria puede beneficiarse de las ayudas al desarrollo, puesto que son pequeñas empresas que contribuyen a diversificar la economía rural, que ayudan a fijar población y a conservar el patrimonio cultural, histórico y arquitectónico, y que realizan un papel importante en la promoción cultural”.
El presidente de RECAMDER también ha defendido que aunque algunas medidas están dirigidas en exclusiva a entidades públicas, “los Ayuntamientos y los propios Grupos de Desarrollo Rural pueden ser clientes de la industria cultural y creativa” y ha animado a las empresas y colectivos culturales a presentar proyectos “porque no podemos permitir que al final del periodo tengamos que devolver dinero a Europa por no haber sido capaces de invertir como sucedió en la programación 2007-2013, en la que se devolvieron 14 millones de euros por no haber proyectos suficientes”.
José Juan Fernández ha enumerado algunas de las medidas contempladas en el Programa de Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha de apoyo a las inversiones en el ámbito cultural, como la ayuda a la mejora o ampliación de pequeñas infraestructuras o el mantenimiento, recuperación y rehabilitación del patrimonio rural. Entre ellas, ha destacado las incluidas en la estrategia Leader, de las que se podrán beneficiar microempresas o pequeñas empresas.
Estas ayudas van dirigidas a financiar cursos, jornadas y actividades de demostración, inversiones en la creación, mejora y expansión de infraestructuras a pequeña escala en servicios básicos y de ocio o actuaciones en patrimonio cultural, como pueden ser acciones de concienciación e información sobre el patrimonio rural, conservación a pequeña escala de bienes inmuebles del patrimonio rural, inventarios y catálogos de patrimonio histórico y cultural, o la preservación del patrimonio inmaterial como música, folklore o etnología. El porcentaje de ayuda concedida oscilará entre un 90% en el caso de operaciones no productivas y un 30% en el caso de actuaciones productivas que sean concedidas a partir del 1 de enero de 2018.
Las ayudas también sirven para poner en marcha una empresa o negocio. Como requisitos, se establece el hecho de que la inversión se lleve a cabo dentro del territorio del Grupo de Desarrollo Rural que gestiona los fondos, que consolide o cree un puesto de trabajo y que haya compromiso de mantener la actividad durante al menos 5 años.
Por último, el presidente de RECAMDER ha invitado a todos los representantes de la industria cultural de la región a acercarse al Grupo de Desarrollo Rural más cercano a su territorio, a conocerlo y a participar activamente en él, “porque todos podemos aportar ideas y proyectos para mantener vivo nuestro medio rural”.
