El presidente de UNICEF España, Carmelo Angulo, se ha referido al Pacto por la Infancia de Castilla-La Mancha que está en fase de elaboración conjuntamente con el Gobierno autonómico y los partidos políticos con representación en las Cortes regionales y que está «muy avanzado», y se ha mostrado confiado en que se pueda hacer público en próximas fechas.
Así lo ha asegurado Angulo desde Toledo, donde ha recalcado que este acuerdo ya estaba listo el año pasado, pero que no se pudo poner en marcha.
Dentro de este pacto, ha adelantado que se está trabajando en un informe objetivo para proveer de datos al Gobierno y a los ayuntamientos de la región y que así puedan tomar «decisiones y medidas precisas» para combatir la pobreza.
«Hay una predisposición muy buena y se puede firmar el pacto en próximas semanas. Ahora el acuerdo está hecho con objetivos compartidos. Tendrá que tener un presupuesto más adelante, de momento estamos en pleno proceso de evaluación con un informe sobre la infancia en la región que sirva de base», ha detallado.
Este Informe sobre la Infancia en Castilla-La Mancha servirá como «diagnóstico de la situación en la región», con estadísticas de organismos como Eurostat, el INE, el Ministerio de Sanidad y Asuntos Sociales y el Ministerio de Educación.
Se trata de «un reflejo de las estadísticas» para tener un primer elemento de juicio para revisar el estado de la infancia en la Comunidad Autónoma. A partir de ahí, se pretende elaborar un informe más amplio con trabajo de campo propio de UNICEF, que contará con expertos en materia de infancia, también vinculados a la UCLM.
167 MILLONES DE NIÑOS POBRES EN 2030
El presidente de UNICEF Comité Español ha presentado en Toledo el informe sobre el Estado Mundial de la Infancia 2016 desde la Sala de Música de San Pedro Mártir en Toledo, que alerta de que, si las tendencias actuales continúan, 167 millones de niños vivirán en la pobreza y 69 morirán por causas evitables en el año 2030, al tiempo que 750 millones de mujeres se habrán casado aún siendo niñas.
En su exposición, Carmelo Angulo ha hablado de la protección frente al abuso, y aunque ha reconocido que muchos niños han salido de la pobreza en los últimos años y se están afrontando en mejores condiciones diversas enfermedades, todavía hay un millón de nuños que mueren al año por neumonía.
Los niños, ha dicho, siguen experimentando abusos o violencia, y hasta 250 millones de infantes viven en países en conflicto privados de una vida normal.
Angulo ha explicado que hay amenazas muy extremas contra la infancia, entre ellas la falta de educación. «Más de 124 millones de niños no disfrutan de su derecho a estudiar en la escuela», ha lamentado, añadiendo que incluso en el mundo desarrollado existen problemas en la escuela cada vez más agudizados, como el acoso o el ciberacoso.
Aunque el informe señala que ha habido progresos «considerables», los avances «no han sido justos». En este punto, considera Angulo que los niños en mayor situación de pobreza tienen el doble de probabilidades que los más ricos de morir antes de cumplir cinco años.
«El modo en que abordemos las necesidades y aspiraciones de los niños determinará nuestro futuro común, porque la infancia es el presente y el futuro», ha añadido.
EMERGENCIAS NATURALES
El informe de UNICEF calcula que a lo largo de un año ocurren alrededor de 200 emergencias en más de 80 países, en las que principalmente los niños son las víctimas más afectadas.
En este punto, ha lamentado lo «pronto» que se olvida la sociedad de estas catástrofes, e incluso ha criticado que este martes no ha visto ninguna información sobre Haití tras el paso de un huracán hace apenas cuatro días.
Por ello, ha aprovechado el presidente de UNICEF para hacer un llamamiento a la sociedad castellano-manchega para ayudar a los más de 500.000 niños afectados por esta catástrofe natural.
Carmelo Angulo también ha mencionado la crisis de los refugiados como otra de las grandes catástrofes actuales. «Cuesta entender que seamos tan reacios ante la emigración cuando Europa ha sido emigrante».
Desde UNICEF, la apuesta ante este problema pasa por dar recomendaciones a la Unión Europea sobre cómo tratar a los niños refugiados que entran, atenderles psicológicamente y ofrecerles la posibilidad de rehacer su vida en los países receptores.
«Este país tiene compromiso con 17.000 refugiados y apenas 350 han entrado. Y eso que hay gente que está dispuesta a acogerlos», ha enfatizado.
