El secretario general de Podemos en Castilla-La Mancha, José García Molina, ha asegurado este jueves que las relaciones de su grupo político con el Gobierno autonómico siguen «en punto muerto» después de que la pasada semana diera por terminado el pacto de investidura que llevó a Emiliano García-Page a liderar el Ejecutivo castellano-manchego.
Así lo ha afirmado desde la tribuna de oradores durante la segunda sesión del Debate sobre el Estado de la Región, donde ha abundado en que «todo sigue igual que la semana pasada».
Su compañero de bancada David Llorente también ha tenido turno de palabra, en el que ha sugerido que PP y PSOE en Castilla-La Mancha ya tienen una estrategia «perfilada», aunque ahora estén escenificando «un teatrillo» para «intentar diferenciarse».
«Cospedal ha tendido la mano para salvar al soldado Page, y Page también para apoyar a Rajoy en Madrid. Esa es la gran coalición que se está preparando», ha apuntado.
En este punto, se ha referido al «papel revelador» de García-Page «en la crisis orgánica de su partido», que a su juicio se ha definido por «no ser leal ni a la ciudadanía ni al propio PSOE».