El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural del Gobierno de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, ha avanzado que su equipo ya trabaja en la elaboración del Proyecto de Ley que regulará el cuerpo de Agentes Medioambientales, texto que espera esté en vigor antes de que acabe la presente legislatura.
En declaraciones a los medios tras reunirse con representantes de APAM, Martínez Arroyo ha celebrado que tras «varios meses de interlocución» con este cuerpo «ya se ven los frutos», y uno de ellos es que finalmente se instalarán los distintivos luminosos en los vehículos con los que trabajan los agentes, una reivindicación de hace tiempo.
De esta manera, ha dicho Martínez Arroyo, «se garantizará la seguridad haciendo visible a los agentes y poniendo en valor su importancia».
«Es una buena decisión que tomamos con ellos que seguro que va a alegrar y beneficiar a los trabajadores», ha defendido.
Otro de los avances con este cuerpo que ha celebrado el consejero es que se empezará a trabajar en una mejor coordinación de los agentes con el resto de cuerpos, y para ello el propio Martínez Arroyo solicitará una reunión con el delegado del Gobierno en la región, José Julián Gregorio, para lograr ese coordinación con los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.
REIVINDICACIONES
Por su parte, el presidente de APAM Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Martín, ha celebrado el «gesto» del consejero en cuanto a la decisión de instalar los dispositivos luminosos y los avances en cuanto a la ley del cuerpo. En su opinión, los rotativos luminosos son importantes «para garantizar la seguridad del agente».
Por otro lado, espera que la ley que regule su actividad resuelva varias «carencias» detectadas por el sector, como las relativas a competencias –reclaman poder actuar en casos de protección del patrimonio o bienestar animal–; de personal –cuentan con 500 efectivos y reclaman al menos 700–; o de equipo, ya que consideran que la flota de vehículos «está obsoleta».
Entre sus reivindicaciones, se encuentra además la posibilidad de poner en marcha una brigada de calidad ambiental que trabaje en casos como los incendios de Seseña o Chiloeches o en los vertidos al río Tajo.
Los agentes medioambientales de Castilla-La Mancha siguen reclamando además pertenecer a la Consejería de Presidencia para tener una mejor coordinación con otros cuerpos; poder utilizar armas en determinados servicios; contar con formación en defensa personal; poder patrullar en parejas; o contar con sprays de defensa.
