La emblemática cueva de las Bodegas Perales acogió la conferencia “Volviendo a las cuevas” que pronunció el arquitecto José Manuel Olmedo y a la que asistió numeroso público. El acto estuvo organizado por el Ayuntamiento de Tomelloso con motivo del Día Europeo del Enoturismo. Olmedo, que realizó su Proyecto Fin de Carrera sobre las cuevas de Tomelloso, ofreció una visión evolutiva de la historia y la arquitectura de esta suerte de criptas que hace única a la ciudad de Tomelloso.
La alcaldesa de Tomelloso, Inmaculada Jiménez, agradeció la acogida que la familia Perales brindó a la jornada organizada por el Ayuntamiento, que es a toda la ciudad. Jiménez alabó la figura del conferenciante, José Manuel Olmedo, un joven arquitecto, que basó su proyecto fin de carrera en las cuevas de Tomelloso. Es importante, continuaba, que nuestro jóvenes sientan cariño y amor por nuestros tesoros más preciados como las cuevas, los bombos o las chimeneas. Recordó la alcaldesa que quien de los habitantes de Tomelloso, en casa de sus padres, o sus abuelos, no ha tenido una cueva.
Apoyo del Ayuntamiento a las cuevas de Tomelloso
En este Día Europeo del Enoturismo, afirmaba la alcaldesa, está muy bien consumir nuestro vino, pero no hay que olvidarnos de nuestras raíces. Precisamente, en Tomelloso el vino ha nacido en estas cuevas que luego dieron paso a las grandes cooperativas. Es por ello que no podemos olvidarnos de nuestras cuevas, aseveraba y en lo que toca al Ayuntamiento como administración, hay que trabajar por recuperar estos tesoros que desgraciadamente en estos años pasados se han perdido. En ese sentido, Jiménez anunció que se va a rehabilitar la cueva de la Casa del Gallego, usándola como un recurso público que todos los vecinos puedan visitarla y va a ser, además, un museo del vino, para conocer cómo se elaboraba. Así, se va a conformar una ruta de cuevas para que tomelloseros y visitantes conozcan esta construcción que nos hace únicos.
Potenciar y poner en valor las cuevas
El arquitecto dio una visión evolutiva de la construcción de las cuevas, el pasado, presente y, por supuesto, el futuro. En ese sentido, señaló que las cuevas en la actualidad se encuentran en proceso de obsolescencia, muy deterioradas, muchas están quedando como escombreras. De hecho, apareció en un medio de comunicación provincial, relataba Olmedo, que estas construcciones se encontraban en la lista roja del patrimonio. Olmedo preconizó —ya que las cuevas son los elementos que mejor reflejan la identidad de Tomelloso— la necesidad de potenciarlas y ponerlas en valor, tanto para el turista, como para el propio tomellosero que las siente como suyas.
Olmedo repasó además las etapas de construcción de las cuevas en el contexto social. Así, el arquitecto ha catalogado cinco etapas, cada una de ellas viene a raíz de un cambio social, cultural o económico que se da en Tomelloso a lo largo de la historia y que influye en las cuevas. Los cambios van, explicó José Manuel, en el aspecto social, por las personas que trabajan en ellas y en avances tecnológicos, la aparición de las prensas, la evolución de ésta, las tinajas o la destrozadora.
A Olmedo la inquietud por las cuevas le viene “de siempre”, desde pequeño, además, siempre le ha interesado el patrimonio de la ciudad. En torno a eso inició unos estudios que le permitieran llevar a cabo su proyecto. Éste consta de una parte de análisis —que se vio en la conferencia—, mapeados y posibles intervenciones. Olmedo también plantea soluciones, que generan alguna controversia. Mantener lo que ahí y darle otro uso distinto al que han tenido las cuevas a lo largo de la historia, es posible. José Manuel Olmedo aboga por que tanto las administraciones como la iniciativa privada estén volcadas en la recuperación de las cuevas, dado que es “lo que más nos identifica y que no podemos perder”.
Nuestras catedrales
Luis Perales, propietario de la cueva que acogía la conferencia, a nuestro juicio, una de las más emblemáticas de la ciudad de Tomelloso, entiende que estas construcciones han sido, prácticamente el origen de la ciudad. Señaló que las cuevas se dan en Tomelloso por tener el terreno una estructura determinada, tiene una parte alta, dura como una losa y debajo un terreno blando, fácil de trabajar. De la construcción de las cuevas, explicaba Luis Perales, salen las terreras, mujeres que sacaban la tierra con espuertas y que tanta fama tiene en Tomelloso. El anfitrión rememoró lo bonito que era cuando el vino se elaboraba en las cuevas y de ellas salía una especie de humo con olor a mosto. Perales valoró positivamente actos como el que nos reunía en su bodega, señalando que es necesario conocer los orígenes del progreso de Tomelloso y las personas que han participado en el mismo, un ejemplo en Castilla-La Mancha. Señaló que muchas de estas cuevas, si no hay un apoyo institucional para conservarlas, van a ir desapareciendo. Es como conservar castillos, mezquitas o catedrales, abundó, señalando que “para nosotros, las cuevas son como una catedral”.
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