Cáritas Interparroquial de Tomelloso dio cuenta este viernes de la Campaña de Temporeros y el Albergue de Vendimia (este último en colaboración con el Ayuntamiento) de este año. Se han atendido en las dos actuaciones más de 250 personas, destacando el aumento significativo de los temporeros de nacional marroquí y el descenso de trabajadores rumanos. La entidad ha dado un dato para la reflexión, al Albergue de Vendimia han acudido personas que solo ha usado el servicio de ducha y cena, prefiriendo dormir en naves abandonadas. Tal vez, explicaron, haya que replantear ese servicio, adaptándolo a las necesidades reales de los usuarios
La campaña de temporeros de dio inicio el 8 de julio, siendo a partir del 22 de ese mismo mes cuando se generalizó el uso de este servicio en el que Cáritas ofrecía comedor, duchas y ropero. Se han atendido (desde el 8 de julio al 31 de agosto) un total de 144 personas, de ellos, 134 han sido hombres y 10 mujeres. Ha habido, explicaba Teresa Requena, 2 temporeros españoles y 142 inmigrantes, de ellos, los originarios de Marruecos representaron la nacionalidad más numerosa con 127, seguidos de los procedentes de Rumanía con 12 personas. Por edades, la franja entre los 40 y 50 años es la que ha tenido mayor afluencia.
En este servicio han participado 20 voluntarios de Cáritas, señaló la directora de la entidad. Explicó que dado que la mayor parte de las familias de temporeros alquilan viviendas, a las que tenían menores a su cargo se les hizo entrega de bolsas de alimentos. Requena destacó el aumento de temporeros procedentes de Marruecos y el descenso de los originarios de Rumanía en esta campaña.
En cuanto a la campaña de vendimia, que la organización católica lleva a cabo de forma conjunta con el Ayuntamiento de Tomelloso, se ha proporcionado a los temporeros servicios de duchas y ropero, además de cenas y desayuno. Por el albergue han pasado 92 personas que han realizado 379 pernoctaciones. Además de estas personas alojadas en el albergue, Teresa Requena quiso destacar que durante la duración del servicio ha habido una veintena de personas que solo usaban el servicio de ducha. Ha habido una media de 27,1 personas durante los 14 días que ha estado abierto el albergue.
Han sido, por sexos, 87 hombres y 5 mujeres los que ha usado el servicio. Las edades han estado comprendidas entre los 19 y 59 años. Por nacionalidades, ha habido 67 marroquíes y 15 españoles, entre otros. La directora de Cáritas señaló la ausencia de incidentes durante la campaña.
A los alojados en el albergue, Cáritas ha proporcionado un total de 379 cenas, bocadillos y desayunos. Teresa Requena hizo hincapié en que se han servido diariamente cerca de 20 cenas más a personas que no usaron el albergue y que estaban viendo en naves abandonadas. El delegado de Cáritas, Antonio López, señalaba que el hecho de que se haya atendido en cenas y duchas a personas no albergadas debe mover a la reflexión. La circunstancia de que haya quien prefiera dormir en una nave y no hacer uso del alberge hizo que Cáritas, según contó el sacerdote, realizase un trabajo de calle para conocer la realidad de los temporeros y salir a su encuentro. Señaló que seguramente haya que replantear el servicio de albergue de temporeros adaptándolo a las necesidades reales de los usuarios. Así, explicaba, una vez cerrado el albergue, se mantiene abierto el servicio de duchas hasta el 30 de septiembre para atender a esas personas que se alojan en naves.
Cáritas también ha llevado a cabo la campaña de “Vuelta al Cole”. La directora de la entidad explicó que dado que la Diputación de Ciudad Real proporciona ayudas para material escolar, Cáritas ha proporcionado chándales y zapatilla de deportes. Se han atendido 260 niños de 110 familias.
