La Guardia Civil de Ciudad Real ha imputado a cuatro personas como presuntas autoras de 12 robos con fuerza en las cosas cometidos en explotaciones agrícolas en las provincias de Ciudad Real, Albacete y Cuenca.
Las primeras indagaciones se iniciaron a mediados del pasado mes de mayo, como consecuencia del robo en una finca de Moral de Calatrava, en el que fue interceptada una furgoneta ocupada por varias 4 personas. En la furgoneta se transportaban espalderas de hierro para las viñas robados en la finca citada anteriormente.
Por dicho motivo y dentro del Plan de prevención contra robos en explotaciones agrícolas y ganaderas, el Equipo Roca de la Guardia Civil de Valdepeñas inició una investigación sobre las personas que ocupaban la furgoneta interceptada, comprobándose que las mismas estaban afincadas en Albacete y habían sido detenidas por este mismo Equipo el pasado año 2013, en el marco de la operación “Barandas”, por robos en explotaciones agrícolas.
Ante estas circunstancias se comprobó si dichas personas pudieran ser las posibles autoras de numerosos hechos de robo en casas de campo y explotaciones agrícolas y ganaderas, denunciados en la provincia.
Obtenidas las pruebas incriminatorias e indicios objetivos suficientes para imputarles su autoría, se imputo a B.F.E., de 49 años de edad, J.B.A., de 45 años de edad, B.F.F., de 37 años de edad, todos ellos vecinos de Albacete y de M.F.E., de 44 años de edad vecino de la localidad albaceteña de Villarobledo, como presuntos autores de 12 robos en explotaciones agrícolas y ganaderas, diez de ellos cometidos en la provincia de Ciudad Real (10), y uno en cada una de las provincias de Albacete y Cuenca.
El modus operandi utilizado por este grupo consistía en desplazarse de noche en dos vehículos, reconociendo diferentes explotaciones agrarias y ganaderas y localizando los lugares más vulnerables. De esta manera unos llevaban a cabo los robos, mientras otros vigilaban las inmediaciones del lugar para dar seguridad a sus compañeros. Una vez que habían cometido estos, regresaban a sus domicilios, volviéndose a reunir al día siguiente para vender todos los efectos sustraídos en varias chatarrerías o centros de recuperación de residuos así como tiendas de segunda mano.
Las diligencias instruidas han sido entregadas en los juzgados de instrucción competentes en cada caso.