El secretario regional de Podemos y candidato de la formación a la Presidencia de Castilla-La Mancha, José García Molina, se ha mostrado convencido, tras reunirse este jueves con el líder de la formación, Pablo Iglesias, de que el cambio «está llegando». «Estamos ante una oportunidad única y tenemos que aprovecharla», ha dicho.
García se ha pronunciado así en declaraciones a los medios tras la reunión, en la que han participado también candidatos de Podemos de otras comunidades autónomas, y durante la que se ha diseñando la estrategia de campaña que la formación va seguir en los próximos comicios.
«Hemos estado hablando de los microcréditos para financiar a Podemos», ha manifestado, para añadir que la idea es que los ciudadanos puedan aportar desde 100 a 100.000 euros, que tras la campaña les serán devueltos. «Podemos no se financia de los bancos sino de la gente y es una forma de hacer que la gente siga sintiendo que Podemos es algo suyo», ha manifestado.
En la reunión, ha añadido García Molina, también se ha recalcado que los candidatos de Podemos no son profesionales de la política «sino profesionales que acaban haciendo política». «Unos son profesores, otros autónomos, pero ninguno viene del ejercicio político», ha señalado.
«De alguna manera, la política se ha profesionalizado mientras que nosotros somos gente corriente con sus trabajos que ha sentido la necesidad de hacer política», ha argumentado el candidato castellano-manchego de Podemos.
PRIMARIAS EN CASTILLA-LA MANCHA
Sobre las primarias en las que fue elegido candidato, José García Molina ha destacado que el resultado «es el que la gente ha querido y votado». «La diversidad, la pluralidad y las diferencias de criterios en democracia siempre hay que ponerlas en valor», ha agregado.
«Creo que la posibilidad de elegir a las personas que se creen más adecuadas competentes y capaces para llevar el partido en Castilla-La Mancha y concurrir a las lecciones es una buena noticia», ha manifestado.
Finalmente, ha defendido que los candidatos de Podemos van a concurrir a las elecciones con una idea muy clara, la de «ganar las instituciones castellano-manchegas para sus verdaderos dueños, que son los ciudadanos y la gente».