La presidenta nacional de AFAMMER, Carmen Quintanilla, mantuvo una reunión con las presidentas de la asociación de la comarca de Tomelloso para abordar diversos temas de cara al próximo curso y para “levantar la voz ante la injusticia y la vulneración de los derechos humanos de las mujeres en la comunidad internacional”.
Comienza un mes importantísimo para las mujeres, no solo en España, sino en toda la comunidad internacional en el que se celebra el Día Internacional contra la Violencia de Género, explicó Carmen Quintanilla, recordando que han muerto en nuestro país 42 mujeres a manos de sus maltratadores.
Pero es necesario hablar de la violencia que sufren las mujeres en la comunidad internacional, señaló. AFAMMER denuncia que hay 200 niñas secuestradas por Boko Haram en la selva nigeriana, recordó además Quintanilla que Asia Bibi está encerrada en una cárcel en Pakistán pendiente de ser lapidada por ser cristiana. AFAMMER, continuó Carmen Quintanilla, una organización con estatus consultivo en Naciones Unidas, pide a la comunidad internacional “que paren esa ejecución”. No se puede matar a una mujer por profesar una religión, la que sea. Eso significa que, todavía, la violencia contra las mujeres “es un hecho real en el mundo”.
Quintanilla también que 39.000 niñas son forzadas a casarse cada día y que 30 millones de niñas están en peligro de ser mutiladas mediante ablación. Desde AFAMMER, aseveraba su presidenta, se va a seguir concienciando a la sociedad, pero sobre todo a las mujeres del mundo rural que forman parte de la asociación.
En marzo del 2015 se celebrará en Nueva York la 59 sesión del CSV, donde AFAMMER ha participado todos los años, explicó, allí se revisará la Plataforma de Acción de Pekín veinte años después. La Asociación presidida por Carmen Quintanilla participará también en septiembre de próximo año en el Post-2015 de Naciones Unidas que trabajará los Objetivos del Milenio.
“No podemos olvidar que desgraciadamente hoy se mutila y se vulneran los derechos humanos de las mujeres”, remarcó Carmen Quintanilla “debemos seguir levantando la voz”, una voz clara y fuerte “la de las mujeres de España, de AFAMMER y de la comunidad internacional”.