La alcaldesa de la ciudad, Inmaculada Jiménez y el concejal de Obras, José Ángel López, conocieron de primera mano como se han desarrollado las reparaciones realizadas en los bordillos de la avenida Don Antonio Huertas. Se ha actuado en el tramo comprendido entre el paseo San Isidro y la calle Concordia y las obras han consistido en la reparación de bordillos más próximos al paso de los vehículos, unos bordillos que no han sufrido ningún tipo de mejora desde que se construyó el paseo y presentaban un desgaste propio del paso del tiempo. Con las obras se ha conseguido que tengan la altura necesaria para delimitar la zona de vehículos de la peatonal y también se ha aprovechado para acometer pequeños arreglos en baches y baldosas sueltas como consecuencia de la climatología y del paso de vehículos a las cocheras privadas.
El tramo ha quedado completamente accesible y la idea del departamento de Obras es que a través de planes de empleo u otras subvenciones se vayan ejecutando diversas fases hasta conseguir que la avenida quede reparada completamente en la misma línea.
