El secretario general regional y candidato del PSOE a la Presidencia de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha lamentado hoy que “los cuatro años de destrozos y desmantelamiento” llevados a cabo por el Gobierno de Cospedal estén provocando que la Sanidad pública de la región “esté saltando por los techos”.
Se refería García-Page a la caída de uno de los techos de la unidad de pre ingresos de la zona de urgencias del Hospital Virgen de la Salud de Toledo, hecho que calificaba de muy grave pero que, por desgracia, no ha sido un suceso aislado.
García-Page se pronunciaba de esta manera esta mañana, en Cuenca, en una comparecencia ante los medios de comunicación, en la que aseguraba que lo más triste de este tipo de cosas han ocurrido “después de que ver cómo vamos a terminar la legislatura con 6.000 millones de euros más de deuda pública. Es decir, que con Cospedal hemos acumulado más deuda pública en tres años que en los treinta anteriores de la historia” de Castilla-La Mancha.
Page reprochaba también al Gobierno regional que este haciendo ahora demagogia y queriendo “hacerse una foto a toda prisa porque llegan las elecciones con las obras del futuro Hospital de Toledo cuando lo paró Cospedal nada más llegar y así ha estado cuatro años”.
Y sobre si el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha ha pedido licencia para reanudar la obra, el líder de los socialistas de la región ha aclarado que ha sido solo para la caseta de obra. “Vamos, que piden licencia para poco más que para un quiosco cuando de lo que estamos hablando aquí es de algo muy serio, del futuro Hospital de Toledo”, decía.
No obstante, se comprometía a que el Ayuntamiento de Toledo pueda dar la licencia “en la mitad de tiempo del que tardó Molina cuando el anterior Gobierno inició la obra”. Eso sí, “siempre”, proseguía, “que lo que se pida es la licencia de toda la obras, con el proyecto de ejecución de toda la obra”.
Emiliano García-Page hacía, asimismo, alusión, a las declaraciones efectuadas ayer por Mariano de Rajoy en una entrevista radiofónica. En las mismas, para justificar que a Esperanza Aguirre se le pidiera dejar la Presidencia del PP madrileño para ser alcaldesa y no se hiciera lo mismo con Cospedal, (en su doble condición de Presidenta regional y secretaria general del PP nacional), Rajoy decía que “una cosa es Madrid, que es la capital, y muy importante, y otra Castilla-La Mancha”.
En este sentido, Page exigía a Rajoy una rectificación inmediata ante esas manifestaciones, que él juzgaba “humillantes como castellano-manchego”. Por ese motivo, emplazaba a Cospedal a que ella también pidiera a Rajoy esa rectificación.
“Castilla-La Mancha no es de segunda y Madrid de primera. Lo que vale para Esperanza Aguirre en Madrid, vale para Cospedal en Castila-La Mancha. No sé si lo de Rajoy es una desconsideración hacia Castilla-La Mancha, oes que realmente no tiene ni idea de lo difícil que es ocuparse y gobernar una región tan grande como ésta”.
