El verano es la época perfecta para explorar nuestra creatividad y embarcarnos en proyectos divertidos que no solo nos entretengan, sino que también contribuyan a un estilo de vida más sostenible. En este artículo te proponemos una serie de amenas manualidades que puedes hacer si te quedas en casa en los días de más calor.
Materiales reciclados: dando una nueva vida a lo viejo
Una de las formas más gratificantes de disfrutar de las manualidades es utilizando materiales que de otro modo terminarían en la basura. Así, además de dar rienda suelta a la creatividad, te acercarás un poco más a los principios de la economía circular, un modelo que busca eliminar los desechos y maximizar el uso de los recursos.
Por ejemplo, una idea sencilla, pero con grandes resultados es la de hacer faroles de jardín con frascos de vidrio reutilizados. Solo necesitas limpiar bien los frascos, decorarlos con pinturas resistentes al agua o decoupage, y colocar una vela pequeña en su interior. De esta manera no solo iluminarás tus noches de verano, sino que también darás un toque mágico a tu jardín o terraza.
Otra idea interesante es la de crear un jardín vertical utilizando botellas de plástico. Corta las botellas por la mitad, píntalas con colores vibrantes y cuélgalas en una pared soleada. Llena cada botella con tierra y planta hierbas aromáticas o flores. Así podrás embellecer tu espacio a la vez que dispondrás de hierbas frescas para tus comidas veraniegas.
Para los más pequeños, se pueden crear instrumentos musicales con materiales reciclados: unas maracas hechas con botellas de plástico llenas de arroz o un tambor con una lata vacía son opciones simples que estimularán la creatividad y el sentido musical del peque.
Conectando con nuestro entorno
El verano también nos brinda la oportunidad perfecta para conectar con la naturaleza y utilizarla como fuente de inspiración para nuestras creaciones.
Por ejemplo, podemos hacer cuadros con hojas y flores prensadas. Durante los paseos por el campo o el parque, recolecta hojas y flores y prénsalas entre las páginas de un libro pesado durante una semana. Luego, utiliza pegamento tipo Pattex para fijarlas y crear bonitas composiciones que se pueden enmarcar.
Otra idea encantadora es crear velas aromáticas naturales. Derrite cera de soja (una opción más ecológica que la parafina) y añade aceites esenciales de tus fragancias favoritas del verano, como lavanda o cítricos. Vierte la mezcla en moldes hechos con cáscaras de naranja o limón para un toque extra de naturalidad
Si disfrutas de la jardinería, crear un terrario puede ser un proyecto fascinante. Utiliza un recipiente de vidrio reciclado, como un antiguo acuario o una pecera en desuso. Llénalo con capas de grava, carbón activado y tierra para plantas. Luego, añade pequeñas plantas suculentas o cactus, y decóralo con piedras o figuritas en miniatura. Con esta manualidad podrás traer un poco de naturaleza al interior de tu hogar.
Aprendiendo mientras creamos
El verano es también un momento ideal para reflexionar sobre nuestro impacto en el medio ambiente y aprender nuevas formas de ser más sostenibles. Las manualidades pueden ser una herramienta poderosa para este propósito.
Una actividad interesante es crear tu propio papel reciclado. Reúne periódicos viejos, revistas y otros papeles usados. Córtalos en pequeños trozos y remójalos en agua. Luego, tritúralos para formar una pulpa y extiéndela sobre un bastidor. Una vez seco, tendrás hojas de papel únicas que puedes usar para crear tarjetas personalizadas.
También puedes confeccionar bolsas de la compra reutilizables a partir de camisetas viejas. Solo necesitas cortar el cuello y las mangas, coser el dobladillo inferior y ¡listo! Tendrás una bolsa resistente y lavable para tus compras.
Un compostador casero puede ser un proyecto muy práctico. Utiliza una caja de madera o un contenedor de plástico grande con agujeros para la ventilación. Llénalo con capas alternas de materiales «verdes» (restos de frutas y verduras) y «marrones» (hojas secas, papel). Con el tiempo, obtendrás un rico compost para tus plantas, reduciendo así los desechos orgánicos.
En conclusión, el verano nos ofrece una oportunidad única para combinar creatividad, diversión y conciencia ambiental a través de estas manualidades. Cada proyecto es una forma de dar rienda suelta a ti imaginación mientras contribuyes positivamente al medio ambiente. Así que, ¿por qué no te animas a probar algunas de ellas?