El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha apuntado este lunes que la nueva legislatura que está a punto de comenzar debe servir «para que podamos avanzar en serio en un gran acuerdo nacional sobre el agua», y ha adelantado que sobre este asunto va a solicitar un encuentro con el Gobierno central «que se está incubando».
Durante la visita que ha cursado este lunes a los viñedos que los grupos González Byass y Emperador poseen en la finca Daramezas de Guadamur (Toledo), en la que ha estado acompañado por el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo; el portavoz del Gobierno regional, Nacho Hernando; el delegado de la Junta en Toledo, Javier Nicolás, y la alcaldesa de la localidad, Sagrario Gutiérrez; García-Page ha criticado que se siga empleando «esa vieja letanía que dice que el agua se aprovecha muy bien fuera pero aquí no».
En opinión de García-Page, esta explotación de González Byass, basada en una importante captación de riego, «nos permite decir que nosotros no solo podemos aprovechar el agua como los demás, sino sacarle más rendimiento y usarla sin gastarnos un dineral inmenso de todos los españoles en transportarla». Asimismo, el mejor aprovechamiento del agua garantiza «que nuestra forma de entender la gestión de los recursos hídricos tiene sentido», ha aseverado.
Por eso, se ha comprometido a reclamar en los próximos años «con muchas razones y mucho tesón» que el agua del Tajo es de todos los españoles, «es decir, que también es de todos los castellano-manchegos y de Toledo». «Que sepan viendo en esta explotación que aquí tenemos muchas ganas y posibilidades de aprovechar el agua», ha garantizado, ha informado la Junta en un comunicado.
Por otro lado, el jefe del Ejecutivo autonómico se ha felicitado por estar ante el viñedo de alto rendimiento «con la explotación más avanzada del mundo» que, además, «no es deslocalizable», una circunstancia que sumada a las buenas cifras que la industria agroalimentaria castellano-manchega está dando, especialmente en cuanto a exportación se refiere, «nos tiene que hacer despojarnos de complejos» e incidir en el argumento de que «el campo no está reñido con la innovación».
En último lugar, y tras reconocer la trayectoria empresarial del grupo González Byass, «que siempre ha sido patrimonio sentimental del país y seña de identidad de España», al igual que toda Andalucía, ha puesto el acento en la «sensibilidad» que ha tenido esta empresa por su esfuerzo en preservar el alto valor patrimonial con el que cuenta la finca Daramezas, y por contribuir de una manera eficaz a preservar el medio ambiente «como también lo hace Castilla-La Mancha, la región que más energía limpia produce por habitante», ha apuntado García-Page.
UN MAR DE VIÑEDOS
La Finca Daramezas, de unas 510 hectáreas de terreno y localizada en la vega del río Tajo, pertenece a la empresa gaditana González Byass (Jerez de la Frontera), que ha sido elegida la primera bodega española y la quinta del mundo en el ranking de las ‘100 Mejores Bodegas de 2016’, elaborado por la WAWWJ (World Association of writers and journalists of wines and spirits). Ubicada en el término municipal de Guadamur, a unos cuatro kilómetros del núcleo urbano de esta localidad, Daramezas es la primera explotación de este tipo en la población por la alta tecnología que aplica en su desarrollo.
Cuenta con extensa plantación de viñedo, unas 250 hectáreas, que en su gran mayoría pertenecen a la variedad Airén, una de las más abundantes de España y localizada fundamentalmente en Castilla-La Mancha, que se caracteriza por su productividad y la adaptación a climas secos y calurosos.
Comprada por las bodegas en octubre de 2013, esta finca tiene una importante captación de riego, 6.000 metros cúbicos por hectárea, necesaria para el pionero sistema de plantación en Europa con el que cuentan, que permite cuadriplicar la media de producción de uva. La instalación de un sistema de espaldera de 1,80 metros de altura permite la producción de 30.000 kilos por hectárea.
La firma posee además en la provincia de Toledo otra finca, concretamente en el término de Otero y denominada ‘Finca Constancia’, una superficie de 230 hectáreas adquirida en 2001. El viñedo tiene una extensión de unas 200 hectáreas y fue reconocido en los «Premios Gran Selección 2012» con el Premio Selección Bronce.
