El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha confiado este jueves en que, a nivel nacional y a propósito de la formación del Gobierno, se alcance un «consenso que evite mayores recortes» y una «nueva política de ajuste» ya que si no se alcanza o «no se quiere buscar» ese acuerdo, «nos convertiremos en diques y valladares de esa estrategia de acoso permanente a quien más lo necesita».
Durante su intervención en el X Encuentro Regional de Salud Laboral de CCOO, celebrado en Toledo y ante el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, García-Page ha asegurado que al final en España «alguien tendrá que asumir que el factor de cohesión, de igualdad, además de ser un factor moral e ideológico es económico».
«No va a haber cohesión ni serenidad política en España si antes no hay cohesión y serenidad social», ha manifestado el presidente autonómico, que se ha mostrado convencido de que «una parte de las tensiones y egoísmos territoriales que se están poniendo sobre la mesa tienen que ver con esa falta de cohesión», y ha señalado que hay «muchas condiciones para que se pueda replantear el itinerario y el calendario».
En este sentido, García-Page se ha referido también a la necesidad de «abordar a fondo» la posición de España en la UE para que «no se convierta en el aliado táctico de Rajoy». «Habría que llegar a un consenso razonable sobre qué posición debemos tener en la UE, donde ahora mismo algunos países se están beneficiando de nuestra precariedad», ha indicado.
El presidente de Castilla-La Mancha ha asegurado que otras comunidades autónomas y no solo la que él preside van a «estar muy vigilantes» respecto de sus derechos y competencias, y ha adelantado que también van a «tomar un papel activo en este mosaico complejo que ha quedado en la política», donde no solo va a ser necesario el concurso de todos los grupos parlamentarios en el Congreso sino también «cuajar equilibrios y consensos con todas las administraciones públicas».
